Anolan is a soloist in a string orchestra, lives with her mother and dedicates every minute to his profession; Enmanuel is a peasant resident in the Sierra Maestra who devotes his time to working the land, accompanied by his young son.
Al observar de forma alterna la cotidianidad de Anolan y Enmanuel, el documental pulsa en las expectativas individuales de dos personas que, en condiciones de vida diferentes, son capaces de encontrar un modo de redimir sus vidas y ser felices. Es sorprendente cómo en las imágenes vibra la dimensión existencial de estos individuos con solo reparar en instantes de su transcurrir cotidiano.